Santiago 5:7 “Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía.”
Es importante que usted que es un labrador y tiene la semilla la plante, para que luego, cuando venga la lluvia, el precioso fruto aparezca.